Descubrí cuánto vas a pagar en cada cuota. Evitá sorpresas y calculá el costo total antes de pedir tu crédito.
Definí tu necesidad y parámetros básicos
- Monto a solicitar, plazo (meses) y frecuencia de pago (mensual/quincenal).
- Estimá una cuota objetivo que no supere el 30–35% de tus ingresos netos.
Identificá los 3 números clave
- TNA (Tasa Nominal Anual): referencia base.
- TEA (Tasa Efectiva Anual): capitaliza intereses; más real que la TNA.
- CFT c/IVA (Costo Financiero Total): incluye TODOS los costos (intereses + comisiones + seguros + impuestos). Es el dato decisivo para comparar.
Verificá el tipo de tasa y su vigencia
- ¿Es fija o variable? Si es variable, ¿cada cuánto ajusta y con qué índice?
- ¿La tasa “promo” aplica solo a las primeras cuotas? ¿Por cuánto tiempo?
Solicitá la tabla de amortización
- Confirmá el sistema francés (cuota fija; cambia la composición capital/interés).
- Revisá mes a mes cuánto pagás de capital e intereses y cómo evoluciona el saldo.
Usá un simulador y anotá resultados
- Ingresá monto, plazo y tasa para obtener cuota estimada.
- Compará el resultado del simulador con la tabla de amortización/contrato.
Listá y sumá costos “ocultos” al cálculo
- Gasto de otorgamiento, comisión administrativa, mantenimiento de cuenta, seguro de vida/desempleo, impuestos (IVA) y cargos por cobranza.
- Confirmá si están incluidos en el CFT c/IVA; si no, incorporalos manualmente.
Calculá el costo total del préstamo
- Multiplicá la cuota final (con todos los cargos) por la cantidad de cuotas.
- Restá el monto recibido para conocer el costo financiero total en pesos.
Compará ofertas a igualdad de condiciones
- Misma moneda, monto y plazo.
- Elegí por CFT c/IVA (no por TNA). Un CFT menor, a mismo plazo, conviene más.
- Ejemplo conceptual: si A tiene TNA más baja pero CFT más alto que B, conviene B.
Chequeá políticas de precancelación y mora
- ¿Hay comisión por cancelar antes? ¿Cuál es el punitorio por atraso?
- ¿Existe período de gracia, recargos por recordatorios o refinanciación automática?
Hacé una prueba de estrés de tu presupuesto
- Sumá +10% a la cuota estimada y verificá si aún podés pagar sin ahogarte.
- Considerá gastos fijos y posibles imprevistos (salud, vivienda, trabajo).
Confirmá la operativa de cobro y vencimiento
- Medio de pago (débito automático, transferencia, efectivo) y día de vencimiento.
- Costos por pago fuera de término o por cambiar la fecha de débito.
Conclusión
Calcular correctamente las tasas y los intereses de un préstamo online no es un detalle menor: es la clave para evitar sorpresas y comprometer tu presupuesto de manera responsable.
Al comparar el CFT, revisar la tabla de amortización y sumar todos los costos ocultos, podés elegir la opción que realmente se ajuste a tu bolsillo. Recordá: un préstamo bien analizado no solo te da liquidez inmediata, también protege tu economía en el largo plazo.