El crédito hipotecario aparece como la solución más común para dar ese gran paso.
Definí tu presupuesto y tu capacidad de pago
- Calculá ingresos netos familiares y destiná máx. 30–35% a la cuota.
- Proyectá gastos fijos (expensas, servicios, transporte) y un margen para imprevistos.
- Hacé un rango de precio del inmueble según barrio y metros.
Ahorrá para el anticipo y gastos de escrituración
- La mayoría de los bancos financian 70–80%; el resto es anticipo.
- Estimá 5–8% del valor para escribano, sellos, informes y tasación.
- Separá un fondo de mudanza y adecuaciones (pintura, arreglos, mobiliario básico).
Compará bancos y usá simuladores online
- Simulá UVA vs. tasa fija/variable, plazos y CFT (costo financiero total).
- Pedí por escrito TEA, CFT, seguros obligatorios y comisiones.
- Guardá capturas/cotizaciones para comparar manzana con manzana.
Hacé la precalificación bancaria
- Presentá recibos de sueldo/monotributo, extractos y resumen de tarjetas.
- El banco verifica relación cuota/ingreso, estabilidad y antecedentes.
- Obtené un monto máximo preaprobado para salir a buscar con realismo.
Elegí la propiedad y pedí la tasación
- Confirmá que sea “apta crédito”: título, planos, reglamento de PH, impuestos al día.
- Solicitá al banco la tasación oficial; si da menor al precio, renegociá o aumentá anticipo.
- Revisá expensas, VEP/ABL/ARBA y estado de servicios.
Presentá el legajo con toda la documentación
- Personales: DNI, CUIL, comprobante de domicilio, estado civil.
- Ingresos: recibos de sueldo / constancia AFIP + comprobantes de monotributo, extractos 3–6 meses.
- Inmueble: título, informe de dominio e inhibiciones, planos, reglamento de PH (si aplica).
Firmá el boleto con condición suspensiva
- Incluí condición suspensiva de aprobación del crédito y plazo claro para escritura.
- Definí penalidades razonables y quién asume cada gasto.
- Dejá asentado el estado de ocupación y fecha de entrega.
Coordiná escribano y firma de hipoteca
- Pedí presupuesto detallado de honorarios, sellos e informes.
- El banco puede sugerir escribano; si elegís propio, verificá que lo acepte.
- Prepará poderes, certificados y seguros (vida y hogar) exigidos.
Recibí el desembolso y la posesión de la vivienda
- En la escritura se instrumenta la compra y la hipoteca a favor del banco.
- Con la inscripción y verificación, se efectúa el desembolso al vendedor.
- Coordiná entrega de llaves, lectura de medidores y cambio de titularidades.
Configurá el débito automático y mantené un fondo de reserva
- Domiciliá el pago de cuotas y activá recordatorios.
- Sostené un colchón de 3–6 cuotas para contingencias.
- Evaluá amortizaciones anticipadas cuando te convenga (consultá costos y aplicación a capital).
Conclusión
Solicitar un crédito hipotecario no tiene por qué ser complicado si seguís un plan organizado y conocés bien cada etapa del trámite. Con la información correcta, podés comparar opciones, calcular tu capacidad de pago y dar el salto hacia tu primer hogar con mayor tranquilidad.
El secreto está en planificar, informarse y actuar con responsabilidad: así, tu sueño de tener una vivienda propia puede transformarse en una realidad sólida y sostenible. 🏡