Formas de Pago de Facturas de EJESA
EJESA te brinda múltiples alternativas para realizar el pago de tu factura, cada una con características particulares. A continuación, te explicamos cómo utilizar cada método de forma sencilla:
Pago online:
- Ingresa al portal web de EJESA
- Visita la página principal de EJESA.
- Localiza la sección de “Pagos” o “Mi cuenta”.
- Inicia sesión o regístrate
- Si ya tienes una cuenta, ingresa tus credenciales. Si no, crea una cuenta siguiendo las instrucciones.
- Selecciona la factura a pagar
- Verás una lista de tus facturas pendientes. Escoge la que deseas abonar.
- Elige tu forma de pago
- Las opciones pueden incluir tarjeta de crédito, débito o transferencia.
- Confirma y guarda tu comprobante
- Verifica que todos los datos sean correctos y finaliza el pago. No olvides guardar el recibo para tus registros.
Débito automático:
- Solicita la activación
- Puedes hacerlo a través del sitio web, por teléfono o visitando una oficina de EJESA.
- Completa el formulario
- Llena el formulario con tus datos bancarios y personales.
- Entrega el formulario
- Envíalo vía correo electrónico, por correo postal o directamente en una oficina.
- Verifica la activación
- EJESA te notificará una vez que el servicio esté habilitado. Recuerda mantener fondos suficientes en tu cuenta antes de la fecha de vencimiento.
Pago en efectivo:
- Dirígete a un punto de pago autorizado
- Lleva contigo tu factura, impresa o en formato digital.
- Realiza el pago
- Acércate a la ventanilla y paga tu factura.
- Guarda el recibo
- Asegúrate de obtener y conservar tu comprobante de pago.
Transferencia bancaria:
- Accede a tu banco online
- Inicia sesión en tu plataforma bancaria.
- Realiza la transferencia
- Elige la opción de transferencias y agrega los datos bancarios de EJESA.
- Introduce el monto exacto
- Asegúrate de que el valor corresponda al de la factura.
- Confirma y guarda tu comprobante
- Finaliza la operación y guarda el recibo de la transacción.
Cada método de pago tiene sus particularidades, por lo que puedes escoger el que mejor se ajuste a tus hábitos. El pago online y el débito automático son rápidos y cómodos, mientras que el pago en efectivo puede ser preferido si gestionas tus finanzas de manera personal.
La transferencia bancaria es ideal para quienes ya utilizan servicios bancarios en línea, ofreciendo una solución segura y práctica sin desplazamientos.